Consejos fáciles para quitar el dolor en el cuello y la espalda.

El estrés afecta al cuerpo de diversas maneras, desde cambios de humor y dolores de cabeza hasta fluctuaciones de peso. Sin embargo, un efecto secundario del estrés que a menudo se pasa por alto es el dolor de cuello y espalda. Con el tiempo, los episodios repetitivos de estrés pueden causar problemas musculoesqueléticos en estas regiones del cuerpo.

Cuando nos estresamos, el cuerpo libera naturalmente ciertas hormonas. La adrenalina está asociada con el antiguo fenómeno de "lucha o huida" que aumenta nuestra presión arterial, aumenta nuestro suministro de sangre y hace que los músculos alrededor de nuestra columna se tensen y tengan espasmos en caso de que necesitemos huir de la fuente del estrés. El cortisol se conoce como la hormona del estrés; interfiere con una variedad de funciones. Las elevaciones de cortisol pueden conducir a la pérdida de masa muscular y al aumento de la acumulación de grasa.

Normalmente los adultos sabemos que el estrés afecta nuestra columna y cuello y la clasificamos como la principal causa de nuestro dolor.

Otras causas posibles de dolor de cuello y espalda:

1. Estrés: 29 por ciento
2. No hay suficiente ejercicio/músculos débiles: 26 por ciento
3. Trabajo físico: 26 por ciento
4. Sobrepeso: 25 por ciento
5. Hernia de disco espinal: 21 por ciento
6. Sentado en un escritorio en el trabajo: 20 por ciento

Sin embargo, un cierto nivel de estrés está siempre presente para la mayoría de los adultos. Si bien no es realista sugerir eliminar todo el estrés de la vida, podemos tomar medidas graduales para reducir el estrés y aliviar los síntomas del dolor de cuello y espalda en el hogar y en el trabajo.

Dolor de cuello y estrés.

Dada su proximidad a la cabeza, la tensión en el cuello por estrés puede provocar dolores musculares y de cabeza. El dolor de cuello crónico también puede causar fatiga, depresión e irritabilidad.

Además, cuando tu postura es mala, como esforzarte para mirar una computadora o dispositivo móvil o encorvarse sobre tu escritorio, se produce una tensión indebida en los músculos del cuello.

Dolor de espalda y estrés

Por lo general, hablamos de dolor de espalda como dolor en la parte media y baja de la espalda. Con el tiempo, ambos afectan tu postura y la forma en que caminas, lo que puede provocar dolor en las caderas, las rodillas y los pies.

El dolor en la parte media de la espalda incluye los músculos que se ven afectados por la respiración, incluidos los músculos del pecho y los hombros. Cuando estás estresado, tus patrones de respiración cambian y causan tensión en la parte media de la espalda. Tus hombros se encorvan y causan dolor en toda la parte superior y media de la espalda.

El dolor lumbar incluye el coxis y la mitad inferior de los músculos de la espalda. Estos músculos afectan la flexibilidad y la postura. Muchas personas se vuelven más sedentarias durante los períodos de estrés, lo que significa que se estiran y hacen menos ejercicio. Por ejemplo, sentarse en tu escritorio durante varias horas al día cuando estás abrumado en el trabajo puede tensar la columna vertebral y los músculos de la parte baja de la espalda.

Junto con el estrés, las causas comunes del dolor de columna incluyen la obesidad, la mala ergonomía del puesto de trabajo y la falta de ejercicio. Sin embargo, creemos que todos los aspectos de la salud de un paciente deben considerarse como partes de un todo y no como dolencias individuales.

Opciones de tratamiento para el dolor de espalda relacionado con el estrés

Lo primero que hacemos con cada paciente que tiene dolor de espalda es determinar su causa raíz. Es importante entender que ningún adulto puede esperar vivir 100 por ciento libre de dolor o estrés. Sin embargo, podemos discutir formas de minimizar la incomodidad y ayudar a los pacientes a sentirse menos tensos.

Una forma eficaz de reducir el estrés y el dolor de espalda es hacer más ejercicio y estirarse.

La actividad física puede liberar endorfinas y mejorar la salud en general, lo que puede ayudar a reducir el estrés. Asegúrate de levantarte durante la jornada laboral y dar algunas vueltas alrededor de la oficina cada pocas horas, o prueba con un escritorio de pie. En casa, reserva tiempo para hacer ejercicio. La fisioterapia también puede ayudar a aliviar el dolor de columna y devolverle al cuello y la espalda una flexibilidad óptima. Podemos mostrarte estiramientos específicos para identificar áreas problemáticas en el cuello y la espalda.

Comer una dieta saludable también puede ayudar a reducir el estrés.

Cuando comes bien a largo plazo, tu salud general puede mejorar y es probable que te sientas con más energía. Una alimentación saludable es clave para perder peso, y lograr y mantener un peso saludable descarga la presión de la columna y mejora la postura.

Además, es importante hacer un hueco en tu agenda para relajarte.

Muchos pacientes con dolor de espalda están muy ocupados con el trabajo, la familia y los compromisos sociales. Saca tiempo para leer un buen libro, pasar tiempo con familiares y amigos, o practicar la atención plena o la meditación.

Recuerda que estamos especializados, entre otras cosas, en el dolor de espalda y disponemos de muchas herramientas para ayudarte a solucionar tu problema o minimizar tu dolor.

Pide una cita con nosotros y valoraremos tu situación para conseguir aumentar tu calidad de vida.

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